¿Quién no ha disfrutado de eventos en nuestras localidades de origen o limítrofes?. Y seguro que nadie puede negar que también se haya desplazado a otras ciudades para acudir a un acto, sea de índole cultural, artístico, deportivo, por negocios….
Los eventos contribuyen a que se conozca la singularidad de la localidad donde se celebran, y por supuesto, amplía la atracción turística más allá de sus peculiaridades paisajísticas o gastronómicas, que son las principales cualidades que “venden” un destino.